19 de mayo de 2010

Mirad mis obras, poderosos, y que os llene el desespero (2a. parte)

El Niño de la Gripe Porcina


Seguramente, cuando sea más grande, Edgar Hernández va a querer que se acuerden de él por algo más que por ser el “Paciente Cero”, el primer ser humano en contraer el virus H1N1, que llevó a la muerte a más de 14.000 personas en todo el mundo. Pero La Gloria, el pequeño poblado al este de México, donde vive Edgar, de seis años de edad, está determinado a recordar su contribución (y atraer a turistas), de modo que ha erigido esta estatua en su honor. La estatua está basada en otra infame, pero mucho más antigua, obra de arte, el urinario “Manneken Pis”, de Bélgica.


Khan!!!!


En gran parte del mundo se piensa en Gengis Khan como un brutal conquistador cuyo imperio se extendió por la mayor parte de África a principios del siglo XIII. Pero en Mongolia es considerado el héroe nacional, y de paso una lucrativa fuente de turismo. Todo, desde los aeropuertos y hoteles hasta los cigarrillos y el vodka llevan su nombre, pero el colmo de esta devoción a Gengis podría ser esta estatua ecuestre de 39 metros de altura que se eleva sobre las estepas aproximadamente a una hora de distancia de Ulan Bator, la ciudad capital. La estatua está recubierta de 250 toneladas de acero inoxidable, y los visistantes pueden tomar un ascensor hacia la cima de la cabeza del caballo. El mismísimo Gengis posiblemente hubiera estado orgulloso.


Planet Hollywood, Serbia


Con la guerra civil, las dictaduras, y la pérdida de Montenegro y Kosovo, las dos últimas décadas no han sido buenas para el antiguo estado Yugoslavo. Tal vez esta deprimente historia tenga algo que ver con esta extraña tendencia de los pueblos serbios de construir estatuas de celebridades extranjeras. Estas incluyen a Silvester Stallone como Rocky Balboa, Johnny Weissmuller como Tarzán, Bruce Lee (la leyenda del kung fu), la estrella del reggae Bob Marley, Samantha Fox (la modelo devenida en cantante, británica) y el actor Johny Depp. En el pequeño pueblo de Zitiste, donde se construyó la estatua de Rocky, un lugareño le dijo, al New York Times, “Mi generación no puede encontrar modelos de roles, de manera que tenemos que buscarlos en otras partes. Hollywood puede darnos una respuesta”.


Conveniente Memorial


El héroe de la independencia de Venezuela, Simón Bolívar, soñaba con un gigantesco imperio que abarcara toda América Latina, pero aún así se sorprendería si viera su grácil imágen adornando las calles de Teherán. Una estatua de Simón Bolívar fue presentada en la capital iraní durante una visita del presidente venezolano Hugo Chávez en el 2004. Estos dos países se han convertido en estrechos socios comerciales, en estos últimos años, gracias a una serie de acuerdos energéticos y a la compartida oposición a la política exterior de los Estados Unidos. Un año antes se había presentado una estatua del erudito persa del siglo XI Omar Khayyam en Caracas.


Vida después de la muerte




Ya sea que gobiernen un pequeño pueblo en México o una superpotencia mundial, la mayoría de los líderes quiere ser recordado, y las grandes obras públicas son una forma muy fácil de dejar su marca. Pero al igual que los Lenín desmoronados en los parques de la Europa Oriental, un símbolo de la inmortalidad puede volverse rápidamente obsoleto. Aquí, el monumento Mansudae de Pyongyang representa al ex lider norcoreano Kim Il Sung señalando hacia un glorioso futuro socialista.


Fuente
The World’s Ugliest Statues: when bad art and bad politics meet. By: Joshua Keating.